Dos aspirantes que se disputan el codiciado lugar como candidato a la presidencia por el partido gobernante de México, Morena, cerraron el fin de semana sus campañas por la nominación.
En los últimos meses, la ex jefa de gobierno de Ciudad de México Claudia Sheinbaum y el ex secretario de Relaciones Exteriores Marcelo Ebrard han competido codo a codo por la candidatura del partido populista del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Se considera que obtener la candidatura de Morena es una línea directa a la presidencia debido a la popularidad de López Obrador. Sondeos recientes colocan a Sheinbaum por delante de Ebrard en la contienda por la nominación.
Los rostros y nombres de los dos aspirantes han recubierto marquesinas y muros de todo el país cuando ambos realizaban giras para afianzar respaldo.
“La igualdad no es un privilegio sino un derecho fundamental… ¡Que viva el presidente López Obrador! ¡Que viva México!”, dijo Sheinbaum el sábado.
El abanderado de Morena para las próximas elecciones será elegido esta semana en una votación interna del partido y los resultados se darán a conocer el 6 de septiembre. Una vez elegido, el candidato ganador comenzará su contienda por la elección presidencial en junio de 2024.
Los candidatos fueron recibidos con fuertes ovaciones el fin de semana. Ambos han destacado su cercanía con el presidente y durante su campaña han difundido mensajes de progreso e igualdad social.
“Queremos un país mejor, queremos seguridad, queremos un sistema universal de salud, queremos igualdad de género, queremos empleos muy bien pagados, crecimiento… queremos un país triunfador”, sostuvo Ebrard ante sus simpatizantes el domingo.
Sin embargo, ambos candidatos carecen del carisma particular que atrajo a muchos mexicanos al presidente, conocido popularmente por sus iniciales AMLO. Esto le ha permitido a otros políticos entrar a la competencia, en particular a Xóchitl Gálvez, una probable aspirante presidencial por la oposición.