"¡Impactante y emocionante! El destino de los espectáculos con animales en juego: ¡Más cerca que nunca de las 4 millones de firmas!"
Vía referendo se espera abrir el camino para que en Colombia se prohíban las corridas de toros, novilladas, peleas de gallos, rejoneo y coleo. Esta es la pregunta que deberán responder los colombianos.
La Registraduría hizo entrega del formulario para la recolección de firmas de apoyo al llamado referendo por los animales. Los promotores deberán recolectar 4 millones de apoyos, requisito inicial para convocar al referendo. La iniciativa busca que los colombianos se pronuncien a favor de derogar la norma que hoy permite que en el país se celebren corridas de toros, novilladas, becerradas, corralejas, tientas, peleas de gallos, rejoneo y coleo.
Si los promotores logran recolectar el número de firmas, que debe ser el 10 por ciento del censo electoral, en Colombia se abrirá el camino para que dichos espectáculos sean prohibidos y quienes participen en ellos sean sancionados, de acuerdo con las normas de policía y penales vigentes.
La pregunta que se les formulará a los colombianos en el referendo será la siguiente: “¿Está de acuerdo en que se derogue el artículo 7 de la Ley 84 de 1989, que permite actos de crueldad con animales en las corridas de toros, corralejas, riñas de gallos, novilladas, becerradas, tientas, el rejoneo y coleo, así como en los procedimientos utilizados en estos espectáculos?”.
Los promotores del referendo tienen hasta el 19 de noviembre para recolectar y entregar las firmas ante la Registraduría. Cumplido este paso, tendrán hasta el próximo 30 de diciembre para entregar los estados contables, los cuales deberán ser validados en un plazo de 45 días.
Cumplidos estos requisitos, el Congreso de la República deberá expedir la ley por la cual se convoca a un referendo derogatorio.
De cumplirse estos pasos, los promotores de la iniciativa tienen proyectado que para el primer trimestre de 2025 los colombianos voten si están de acuerdo con derogar la ley que permite dichas prácticas. Varias de ellas, como el rejoneo, el coleo, las corridas de toros, las novilladas, becerradas y riñas de gallos cuentan con amparo constitucional porque son consideradas manifestaciones culturales y tradicionales.